Para terminar el año, y de forma breve, voy a hacer un balance del estado de este proyecto de restauración (aunque en realidad haya, de momento, poca restauración, y bastante más de otras cosas, pero que también forman parte de este complejo mundo, y pueden resultar interesantes e instructivas, y hasta entretenidas). Lo del 1% cultural está en punto muerto, mientras no demos nosotros el paso, así que, ajustándonos al reducido presupuesto total de 40.000 euros obtenido con la participación de la ADRI Cerrato Palentino, habrá que tirar para adelante.
Las obras pueden empezar ya, pero todavía no van a hacerlo, porque no hay dinero. Bien; mientras tanto, estoy trabajando en tres cosas: redactar un plan museológico, aprender un poco sobre iluminación museística, y preparar una operación de publicidad y captación de recursos.
De la diferencia entre Plan Museológico y Proyecto Museográfico nos hablaron un poco en el Máster de Restauración de la Universidad de Valladolid. Me puse a indagar más, y encontré un par de documentos interesantes: Criterios para la Redacción del Plan Museológico, y el Plan Museológico del Museo de León. El segundo es una ejemplo basado en el primero. Bueno, la verdad es que a través del apartado de museos de la web del Ministerio de Cultura hay disponible mucha documentación sobre museología y museografía, que he de reconocer no he consultado todavía. También me he cogido en la Biblioteca Pública un libro titulado Museografía Didáctica, de la Editorial Ariel (de la que no he conseguido encontrar web), editado en 2005, que todavía no he empezado. En mi plan museológico estoy siguiendo más o menos las indicaciones del “Criterios” del Ministerio, que es bastante claro y conciso. Lo que ya no sé es si esto del Plan Museológico no será un documento demasiado abstracto, de intenciones buenas, pero que caiga en saco roto. Mi intención es realizar un Plan para que, al menos, nos consideren con seriedad en las altas instancias a la hora de presentarnos y, sobre todo, de pedir, y para diferenciarnos de los pequeños museos o salas de exposiciones de diversa temática que surgen en pueblos, y que no poseen nada parecido.
Para saber cosas sobre iluminación museística, me he propuesto revisar los libros que utilicé en la asignatura de Electrotecnia y Luminotecnia, aunque antes de hacerlo me he metido directamente con otro que cogí también de la Biblioteca (al mismo tiempo que el anterior), y que se titula “Manuales de Luminotecnia. Museos y Exposiciones”, de Ediciones Ceac, del año 1999; no sé si serán los de los famosos cursillos; la web que indican en el libro, por cierto, ya no existe. Pero el texto es incluso entretenido.
Y dentro de la operación de propaganda y captación de recursos, con el objetivo de implicar a la población y de intentar formar una colección municipal heterogénea donada por los habitantes, ya he diseñado un poster en gran formato, sencillo, pero creo que claro y directo, que diseminaremos por el pueblo. Tengo también en mente hacer un díptico para repartir. Y más adelante estudiaré estrategias de autofinanciación, que son muy fáciles de pensar, pero de aplicación y efectividad más dudosa en un lugar tan pequeño (¿amigos del museo? ¿patrocinios privados? ¿venta de recuerdos?).
Sobre detalles y progresos de todo esto ya iré informando.